Los duros meses del confinamiento obligaron a incrementar el trabajo de los Servicios Sociales municipales en la atención a multitud de personas mayores que vivían en soledad, con la obligación de quedarse en casa. Gestionar la compra de alimentos y medicamentos y la entrega a casa por casa, en colaboración con diferentes organizaciones como Cruz Roja o Protección Civil, fue una de las labores que hubo que articular.
María del Mar Marqués, Concejala de Servicios Sociales, argumentaba que afortunadamente Valdepeñas contaba con recursos para la atención total de las personas mayores como el servicio de comida a domicilio. Aquella persona mayor que no se encontrara en disposición de trabajar, cocinar o ir a la compra, Protección Civil ayudaba a esas personas a acercarles la compra a sus domicilios, ya que en la situación de pandemia que nos encontrábamos, no era lógico que personas de alto riesgo por el Covid-19, se expusieran a él por tener que cubrir esas necesidades. El servicio de farmacia también fue muy demandado por los mayores de la localidad. Cruz Roja ayudó a las personas mayores en este campo.
Otro complicado frente de trabajo estuvo en el servicio de ayuda a domicilio, en el que el personal autorizado, lleva a cabo tareas domésticas en las casas de los usuarios. En este caso tenía y tiene la consideración de personas con factor de riesgo. Había que mantener el servicio y prestarlo de manera segura, tanto para los beneficiarios como para los trabajadores. Fue otra prioridad del área de servicios sociales, considerando además que este servicio de titularidad pública, lo desempeña una empresa.
La sabiduría de las personas mayores es el lema que el Ayuntamiento de Valdepeñas adopta este año para el 1 de Octubre. Un primero de Octubre para el que ha tenido que prescindir del acto público, que en años anteriores, congregaba a cientos de mayores y que ha sido sustituido por un café-tertulia.