Las mujeres han formado parte desde siempre de la agricultura, indirecta o directamente. Pero en los últimos años su relevancia en el campo es cada vez mayor, sobre todo porque son ellas mismas las que lo trabajan. En su crecimiento juegan un papel fundamental las cooperativas, por eso AMFAR organizó ayer una jornada sobre "Mujeres y cooperativismo' en la Vinícola de Valdepeñas.
La mayoría venían de Moral de Calatrava, pero también hubo varias mujeres ayer de la Ciudad del Vino en la Cooperativa Vinícola de Valdepeñas con motivo de la jornada que organizaba AMFAR sobre el rol femenino en estas agrupaciones de quienes trabajan el campo.
Y ante ese objetivo, las mujeres tienen mucho que decir. Por ejemplo, la presidenta de AMFAR Valdepeñas, Andrea Prieto, asegura que "la mujer siempre ha tenido un papel relevante, pero ahora más que nunca".
Por su parte, la presidenta de AMFAR Moral de Calatrava, Obdulia López, considera que "valemos todas muchas y no nos lo creemos. Pienso que las mujeres tienen que participar en las cooperativas que en el mundo rural la salida de la agricultura son las cooperativas, no el empresario". En las cooperativas se cumple aquello de que juntos o juntas somos más fuertes.
La Cooperativa Vinícola de Valdepeñas fue presentada por su gerente como un "ejemplo de igualdad y asociación".
Entre todas las mujeres que acudieron compartieron varias horas de debate sobre las posibilidades administrativas y económicas de la titularidad compartida y sobre el relevo generacional.
Tras esa intensa jornada, todas juntas, incluidos los hombres, conocieron a fondo la Cooperativa valdepeñera.
Iniciativas como esta consiguen que el crecimiento del sector primario se mantenga a pesar de los cambios sociales y que cada trabajador y trabajadora tenga el reconocimiento que merece su esfuerzo.