La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Rescatado de La Solana, estrenó por fin, su ansiada Casa de Hermandad. Casi dos años después, las flamantes instalaciones ubicadas en la calle Rosa Chacel abrieron sus puertas para el uso y disfrute de todos los hermanos. El colectivo cumplía así su sueño más reciente, escribiendo una página más en su dilatada trayectoria.
El 4 de diciembre de 2021 ya es una fecha histórica para la cofradía solanera. Tras una potente inversión, mucho esfuerzo y el retraso provocado por la pandemia, se hizo la luz en la nueva Casa de Hermandad. Directivos, autoridades, clero, y público en general se dieron cita para inaugurar las nuevas dependencias.
La banda de cornetas y tambores de Nuestro Padre Jesús Rescatado interpretó varias marchas procesionales a las puertas del recinto, previo a las intervenciones protocolarias y la posterior bendición. “Ya teníamos ganas de inaugurarla porque estaba todo prácticamente preparado desde el año 2019 y la pandemia lo impidió”, recalcó el presidente de la cofradía, Antonio Mateos-Aparicio, en el estreno oficial. Reconoció la enjundia del proyecto, aunque no pudo cuantificarlo, agradeciendo la colaboración empresas y de particulares, “hemos invertido mucho tiempo y dinero aquí, y lo hemos conseguido gracias a los donativos de los hermanos y del pueblo en general, así que esto es fruto de todos”.
El alcalde Eulalio Díaz-Cano subrayó la labor de la veterana hermandad “se han hecho las cosas con cariño, dedicación y cuidando mucho los detalles, así que el resultado es realmente espectacular”. También habló de un acto muy importante para el colectivo religioso “porque son los guardianes de nuestras tradiciones y de nuestra identidad con un gran trabajo que realizan a diario”.
Los párrocos in solidum de San Juan Bautista, Jesús Navarro y Francisco Javier García de León, pronunciaron posteriormente unas oraciones antes de bendecir el local. Después comenzaría la peregrinación de hermanos y demás muchedumbre por todas las dependencias, en una jornada de puertas abiertas que se prolongó hasta la noche.
La mayor parte de la superficie está dedicada al resguardo de pasos, carrozas y otros enseres de la cofradía. La planta baja también tiene un apartado para el almacenaje de instrumentos de la banda, además de una sala de juntas. En el piso superior, se encuentra el salón de actos, la secretaría y los servicios. Fotografías de los distintos pasos de la hermandad adornan las paredes de las habitaciones, además del gran mosaico con la imagen del titular que se realizó con casi novecientos retratos de hermanos y que está ubicado en la escalera de subida.