La Selección Española de fútbol sala jugó ayer su último partido de preparación para el Mundial de Lituania que arranca el 12 de septiembre. Los de Fede Vidal se impusieron por 2-0 a Japón en una prueba de fuego, teniendo en cuenta que los nipones se encuentran en el grupo de España en la Copa del Mundo.
El partido estaba encuadrado en el Torneo de 'Andalucía Región Europea del Deporte 2021', en el que Japón y España jugaron la final en el Olivo Arena de Jaén. Un encuentro que tuvo firma vinatera y es que Chino se encargó de abrir el marcador con una volea maravillosa que se colaba por abajo, cerca del palo, y en la que Higor Pires no pudo hacer nada.
Cerca de 800 personas fueron las que acudieron al pabellón del Jaén para disfrutar del partido y la Selección no decepcionó. Y es que Adri transformó su doble penalti en el minuto 38 para sentenciar el partido, dejar el torneo en casa y homenajear de la mejor forma posible a Ortiz que cumplía 200 partidos con la elástica roja.
Sergio González se volvió a mostrar a un gran nivel. Todoterreno en todos los aspectos, es oxígeno puro para la Selección Española. Chino, por su parte, es un peligro continuo y una amenaza cuando se acuesta en ese perfil izquierdo que tanto le gusta, para marcharse hacia el centro y castigar a los porteros con sus latigazos.
La concentración de España de cara al Mundial empieza este jueves y las expectativas por nivel de plantilla y por los diferentes perfiles de jugadores que tiene son grandes de cara a esta Copa del Mundo para la que la Selección parte como una de las principales favoritas.