El portavoz de Unidas por Valdepeñas, Alberto Parrilla, ha negado que su grupo impusiera liberaciones de concejales y personal de confianza al PSOE, para alcanzar un acuerdo de gobierno. Acusa al Partido Socialista haber perdido una oportunidad de conformar un gobierno progresista y de izquierda, y de haber pactado con la ultraderecha de VOX, por asegurarse salarios.
Para Parrilla, la abstención de VOX en el pleno de organización del nuevo Ayuntamiento, supuestamente pactada por el PSOE, resulta incomprensible e indignante.
Recalca que las negociaciones con el PSOE se rompieron por no querer hablar de programa, sino de liberaciones y de salarios, extremo que en el PSOE no dejan de negar. La supuesta pretensión de Izquierda Unida-Podemos, de liberar a sus dos ediles y de contar con personal de confianza salió a relucir en el pleno del martes y nadie lo desmintió entonces en la coalición de izquierdas.
Alberto Parrilla ha asegurado que ellos no pretendían liberarse, porque ambos tienen trabajo. A preguntas de los medios, sobre qué hubieran hecho si les hubiera correspondido gobernar: si liberarse o compaginar las funciones de gobierno con sus empleos, Parrilla ha rehusado “entrar en hipótesis”.
El portavoz de Izquierda Unida ha acusado al equipo de gobierno de incrementar un 43 por ciento el gasto en salarios políticos y de haber primado el beneficio propio sobre el interés general. En la coalición de Izquierda Unida-Podemos se preguntan qué ha prometido el alcalde de VOX.
Alberto Parrilla ha concluido afirmando que no "tiran la toalla" por reconducir la relación con el PSOE
