Tanto en Castilla-La Mancha, como en la provincia de Ciudad Real, ha habido alternancia y el Partido Popular se alzó ayer con el triunfo, tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado. El vuelco es aún más claro a nivel autonómico, donde el PP ha conseguido 10 escaños en el congreso; tres más que en las elecciones de 2019, mientras que los socialistas pierden un diputado y se quedan a cinco puntos de la fuerza más votada.
El PP ha ganado en las cinco provincias castellano-manchegas y suma tres diputados más que en 2019, al pasar de 7 a 10 escaños en el Congreso. Victoria aún más holgada en el Senado, donde los populares se hicieron ayer con 15 de los 20 escaños asignados a nuestra región.
Con una participación del 74 por ciento, el Partido Popular sumó ayer 444.000 votos, un 39 por ciento, frente a los 389.000 del PSOE, un 34 por ciento; los 203.000 de Vox, 17% y 3 diputados, y los 83.000 de SUMAR, que con un 7 por ciento de los votos, no obtiene representación en la Cámara Baja por Castilla-La Mancha.
En esta legislatura, los socialistas tenían 9 diputados en el Congreso y han perdido uno. Vox pasa de 5 a 3 diputados y no estará en el Senado.
En la provincia de Ciudad Real, el PP saca 15.000 votos al PSOE, cinco puntos porcentuales, pero ambas fuerzas repiten la representación que tenían en el Congreso, con dos diputados; igual que Vox, que también mantiene su único escaño. Así, son diputados electos por el PP, Carmen Fúnez y Enrique Belda, por el PSOE Isabel Rodríguez y Gonzalo Redondo, y por Vox, revalida su escaño Ricardo Chamorro.
El Partido Popular tendrá tres senadores ciudarrealeños por uno solo el PSOE. El alcalde de Manzanares, el socialista Julián Nieva es el cuarto candidato más votado para la Cámara Alta, con 9.000 votos menos que el tercer senador electo del PP, el montieleño Raúl Valero. Les acompañarán en el hemiciclo los populares Rosa Romero, ex alcaldesa de Ciudad Real y Leopoldo Sierra, alcalde de Daimiel.