Esta mañana ha abierto al público el XXVIII Salón del Automóvil nuevo y de ocasión, en el pabellón ferial Esteban López Vega de Valdepeñas. Por segundo año, la feria del automóvil de Valdepeñas traslada sus fechas a primavera y unifica su oferta uniendo nuevos y de ocasión, para generar mayor afluencia de público.
Este es el propósito de esta unificación, decidida por el sector, después de muchos años en que hubo un salón de vehículos de ocasión en verano y otro de nuevos, en otoño.
Después de años de grandes dificultades e incertidumbres (pandemia, falta de componentes, encarecimiento…), la feria se presenta con alicientes como una presencia masiva de expositores, abarcando multitud de marcas europeas, americanas y asiáticas.
El alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, en la inauguración hacía valer el impulso del sector del automóviles en todas las escalas de la economía; también la local, gracias a los concesionarios. La concejala responsable de Ferias, Julia Cejudo, ponía el acento en esta concentración de marcas, modelos y posibilidades tecnológicas en un mismo espacio. Y en representación de los expositores, Ignacio Carabaño invitaba al público a visitar el salón, después de años en los que el sector ha sorteado no pocas adversidades.
¿ELÉCTRICO, TÉRMINO O AMBOS?
El usuario interesado o necesitado de estrenar vehículo continúa debatiéndose entre los motores de combustión, los eléctricos y la tecnología híbrida. El dilema sigue siendo: el futuro no acaba de llegar y el pasado no acaba de irse. Para comerciales como Amelia Badillo (Renault-Dacia), el apogeo de los híbridos es incuestionable.
Este salón del automóvil, como cualquier otro, plantea un debate más, dentro del mundo del automóvil: la irrupción de las nuevas marcas chinas en el mercado europeo y el prejuicio del consumidor europeo frente a ellas. Jesús Mascaraque es un comercial experimentado con veinte años de experiencia en una marca como Citroën, en un concesionario que ha optado por diversificar su oferta de marcas, incorporando a la china DFSK y otras. Su mensaje es claro: todas las marcas occidentales fabrican componentes o montan sus vehículos en China. Ahora, el fabricante que trabaja para ellos, exporta sus propias marcas con la misma tecnología, pero con precios de hasta varios miles de euros más económicos.
El sábado se espera como día fuerte de público, sobre todo en horario de tarde. El salón cierra sus puertas a las 20:00 horas del domingo. Sabremos entonces las conclusiones sobre los resultados.
