La pandemia ocasionada por la COVID-19 ha producido sendos cambios en la sociedad y ha afectado a distintos negocios e instituciones. El teletrabajo y los actos online han sido un claro ejemplo de rápida adaptación. La situación que se vive ha tenido, tiene y tendrá distintas secuelas en las personas, entre las que destacan las psicológicas.
En una entrevista concedida a Radio Horizonte Juan José Velacoracho, psicólogo solanero, aseguró que la pandemia ha afectado, psicológicamente hablando, de forma diferente a las personas. “Aunque las consecuencias futuras no se saben con certeza, se han incrementado las depresiones y las crisis de ansiedad durante la pandemia” afirmó el psicólogo. El futuro que se augura para la población en general es un aumento de las depresiones, y para algunos sectores profesionales, como los sanitarios, trastorno de estrés postraumático.
La situación también les está afectando a nuestros mayores, en quienes es más complicado observar qué secuelas psicológicas les ha producido la pandemia. “Los colectivos se quejan a través de sus sindicatos o los medios de comunicación, pero los mayores no tienen y no quieren tener voz” comentó Velacoracho. El psicólogo expuso los temas de las llamadas que ha recibido durante esta situación, entre el que destaca el miedo, no solo a morir sino que también a que los familiares no puedan acompañarlos o velarlos tras la muerte. La soledad es otro problema que le plantean en estas llamadas, la mayoría efectuadas por mujeres, según aseguró Velacoracho: “Son las que más lo sufren, debido a que son más sociables y expresan como se sienten frente a los hombres, que se guardan las cosas para ellos y tratan de evadirse yendo al campo, por ejemplo. La mujer está más preparada para soportar cambios bruscos en el tipo de vida que llevamos”.
El aislamiento social al que muchas personas se vieron sometidas durante el confinamiento es una clara causa de enfermedad mental. Un remedio para estos problemas psicológicos pasa por las nuevas tecnologías. El uso de estas permite romper con la ‘barrera’ que se ha creado con el Covid-19, además de un contacto con el mundo exterior que comunica y rompe el aislamiento. “El Whatsapp es una aplicación que no interrumpe a otra persona al enviar un mensaje, es más interactiva que una llamada convencional, y permite realizar videollamdas para ver a otras personas” explicó el psicólogo. Aunque la realidad es que este sector de la población no tiene, muchas veces, los medios o capacidades para utilizar estas herramientas.
En otro orden, se habló con Velacoracho sobre las consecuencias que tiene el teletrabajo en la psicología en las personas: “Las repercusiones de esta nueva manera de trabajo pueden ser graves, pues los españoles somos culturalmente sociales, y esta forma de ejercer la actividad laboral aísla”. “Hay una serie de personas que tienen un carácter depresivo-ansioso que son poco sociales y más solitarios” explicó el psicólogo. A este tipo de personas, la situación les está proporcionando una comodidad que antes no tenían, ya que trabajando presencialmente lo pasaban mal. Esta situación, según comentó, no beneficia a nadie, porque las personas sociables lo están pasando ‘mal’ y las asociales están alimentando aún más su insociabilidad.
