viernes. 22.11.2024
Acto institucional Día CLM
Acto institucional Día CLM

La modelo y empresaria Eugenia Silva, galardonada con la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha, ha reconocido hoy, tras recibir el máximo galardón de la región, que “no pasará un día” sin hacerse “acreedora de éste”, por lo que ha agradecido a esta región, a su presidente “y, desde el corazón”, a todos y todas por esta distinción.

Así lo ha indicado en su intervención en el Auditorio Municipal ‘Pedro Almodóvar’ de Puertollano (Ciudad Real) con motivo de la celebración del Día de Castilla-La Mancha, hoy, 31 de mayo, en el que por primera vez dos mujeres, la propia Silva y la escritora y periodista ciudadrealeña Ángela Vallvey, quien también ha dado las gracias “profundamente” por “este honor”, han recibido esta distinción.

Parafraseando a Antonio Machado, Eugenia Silva ha significado que su infancia “son recuerdos de un palacio toledano” y, por eso, ha reconocido que cuando recibió hace días la comunicación del Gobierno regional de la concesión de esta Medalla de Oro de Castilla-La Mancha, “primero me tuve que reponer de la emoción”, aunque luego pensó cómo era posible “que yo tenga este honor y compartirlo con tantos nombres ilustres y destacados que la han recibido y hoy también la reciben conmigo”.

A continuación, ha confesado, “vinieron a mi memoria los años felices de infancia y juventud vividos en la sin par ciudad de Toledo”, llegando a la conclusión de que “si es por amor a esta tierra y por intentar, desde mi humilde atalaya, enseñar al mundo la riqueza de su patrimonio, su cultura y su gente, gente con mayúsculas, estoy encantada de recibirla”.

Eugenia Silva Hernández-Gil, merecedora de esta Medalla de Oro por su sobresaliente labor de promoción y difusión de Castilla-La Mancha como destino turístico y cultural a través de su imagen altamente reconocida, ha recordado en su video de presentación que, aunque nació en Madrid, se fue a Toledo a vivir “enfrente de San Juan de los Reyes, cuando tenía un año”. Allí, vivió seis, de los que mantiene “amigas fabulosas y profesoras que supieron entender mi profesión. Todo el mundo me apoyó”.

“Siempre he vuelto a Castilla-La Mancha, a Toledo, porque mis raíces están ahí”, ha dicho recordando emocionada sus paseos por Recaredo y los buenos recuerdos de su etapa toledana, una ciudad “rodeada de arte” de donde, reconoce, viene su afición por el mismo. “Todo lo que tengo en mi cabeza de Toledo es bueno. Cómo no voy a volver y cómo no voy a estar feliz de que una región como Castilla-La Mancha me conceda este honor”, ha recalcado, porque es algo que “va más allá”, porque Toledo “es mi vida”.

Ángela Vallvey comparte su medalla con las mujeres de la región

Una vida con la que coincide Ángela Vallvey Arévalo Sánchez, nacida en el pueblo ciudadrealeño de San Lorenzo de Calatrava, que hoy ha sido reconocida por su aportación a la literatura contemporánea española. Vallvey ha recordado su vida en el pueblo y a sus abuelos manchegos, parafraseando en su caso a León Tolstoi, quien decía que "si quieres ser universal, habla de tu aldea. No sé si soy universal, pero sí he encontrado en mi aldea, en mi pueblo, una puerta al universo", ha señalado sintiéndose afortunada.

La escritora se ha referido a su infancia, cuando “no me cansaba de mirar las montañas, que acumulan nubes en los valles, como si una bruma escapara desde sus entrañas y se elevara al cielo”. Aquí, ha continuado, “soñamos con tocar estos cielos” y, en su vida, “Puertollano es un lugar muy importante en el paisaje de mi existencia”.

“Muy agradecida por recibir este honor”, ha continuado, lo está mucho más por hacerlo en esta ciudad de historia minera de “pasado sorprendente y de sorpresas en cada esquina con su fuente Agria y su Paseo de San Gregorio, sus luces industriales”. Es el Valle de Alcudia, donde “no es difícil sentirse bien, porque sentirse en casa es sentirse bien”.

Tras recordar a su padre, Ángela Vallvey se ha mostrado feliz de que su madre sí pudiera acompañarla en este momento, agradeciéndole leer sus “libracos interminables”, su paciencia y su fuerza. Fuerza como la de las mujeres de la región, ha recalcado. “Esta tierra está llena de mujeres poderosas, aunque muchas todavía no lo saben”, ha reconocido con humor socarrón describiéndolas como las “grandes protagonistas del teatro, del amor y dolor del mundo”.

Aquí, ha continuado la escritora, “las mujeres crecen sanas y valientes, atrevidas como un bosque mediterráneo de madroños, quejidos y jaras, quijotescas viajando entre molinos y huertas”. Con todas ellas ha querido compartir su Medalla, “con todas y cada una de las mujeres de mi tierra”, empezando por Luisa María, que ha muerto en Tomelloso por “una violencia ciega” que “cuando no sabe usar las palabras usa los golpes”. Ha instado, por último, Vallvey a disfrutar del Día de Castilla-La Mancha “porque tenemos muchas razones para hacerlo”.

Eugenia Silva y Ángela Vallvey agradecen recibir la Medalla de Oro de Castilla-La...