En el Gobierno de Castilla-La Mancha no vamos a bajar las defensas para mantener un crecimiento del empleo parejo al desarrollo económico por el que trabajamos desde que la ciudadanía nos dio su confianza en el año 2015.
Desde el minuto uno el Gobierno de Emiliano García-Page puso en marcha un plan de recuperación del empleo que contaba con medidas de emergencia para la reinserción laboral, así como estímulos necesarios para dinamizar el mercado de trabajo, no sólo mediante el impulso de la inversión empresarial, sino también mediante la posibilidad de que las personas con necesidades de trabajar encontraran oportunidades reales de empleo o accedieran a una formación que les facilitara dicho empleo.
El diálogo social ha sido constante con acuerdos con los agentes sociales que se han ido renovando cada año, dando a Castilla-La Mancha la estabilidad necesaria para el crecimiento que desea.
Se recuperaron, al mismo tiempo, las políticas activas de empleo que han dinamizado el mercado de trabajo. Se ha recualificado, formado, insertado e integrado a miles de trabajadores y trabajadoras, y lo que es más importante, contando con la participación de la empresa, auténtica protagonista de la generación de empleo durante todos estos años en nuestra región.
Así, el paro registrado en las oficinas de empleo a 1 de diciembre de 2015 afectaba a 219.817 personas, cifra que ha caído hasta las 134.806 en 2023, lo que supone que cada mes han salido de las listas del paro 885 personas en nuestra región. Hoy en día tenemos un 39 por ciento menos de desempleados que hace 8 años, si bien tenemos134.806 razones para seguir impulsando políticas de empleo.
En términos de afiliación a la Seguridad Social, diciembre de 2023 nos dio un dato de 772.693 trabajadores frente a los 633.650 de la misma fecha de 2015. Es decir, un 21,9 por ciento de incremento que se traduce en 139.000 trabajadores más que hace 8 años.
Estas cifras cobran más importancia cuando vemos que se va reduciendo la brecha del empleo entre hombres y mujeres, tanto por tasa de actividad como por desempleo. Es un trabajo arduo que requiere una labor constante, pero en este 2023 que hemos dejado atrás, más de la mitad de las personas que abandonaron las listas de desempleo eran mujeres.
Pero el Gobierno de Castilla-La Mancha es consciente del esfuerzo necesario para seguir cerrando la brecha, y por ello impulsa en cada medida de inserción la necesidad de favorecer el empleo femenino, como así hacemos, por ejemplo, en los conocidos planes de empleo aprobamos recientemente.
Respecto de la temporalidad también podemos hablar de buenos datos, ya que si bien el periodo navideño supone un incremento de los empleos de temporada, como puede ocurrir en otros meses vinculados a la actividad agraria, la realidad nos indica que durante los últimos 8 años el crecimiento de las afiliaciones ha sido constante y puede considerarse ese crecimiento como parte del empleo estructural y no coyuntural, manteniéndose una tasa de afiliaciones temporales para diciembre similar a la de años anteriores.
Hablamos aquí de temporalidad cuando analizamos las diferencias entre las afiliaciones de diciembre en comparación con el siguiente mes de enero. De hecho, históricamente se ha mantenido una temporalidad no mayor al 2 por ciento en términos de afiliación, es decir el descenso de afiliaciones tras la temporada de Navidad no supone más del 2 por ciento del total de afiliados. En consecuencia, lo importante es que, en términos generales, los datos interanuales corroboran el crecimiento de la afiliación para 2023, lo que nos permite hablar de que hoy en día en Castilla-La Mancha tenemos un incremento de afiliación real y estable.
Sobre la temporalidad, atendiendo al tipo de contrato, hay que apuntar que durante el año 2023 la contratación indefinida ha llegado hasta el 45 por ciento, cifra superior a la media nacional. Incluso en un mes de mayor temporalidad, como es diciembre, en Castilla-La Mancha tenemos también una tasa de contratación indefinida superior a la media del país.
Por ser algo más nítido, en diciembre de 2015 la tasa de contratación indefinida fue del 5 por ciento, y en diciembre de 2019, una época de franca recuperación económica previa a la pandemia, fue del 6,36 por ciento. En diciembre de 2023 la contratación indefinida, como hemos comentado, ha llegado al 45 por ciento del total de contratos.
Este importante logro se debe a las políticas de empleo y a la aplicación de la nueva legislación laboral que estabiliza el mercado de trabajo y evita incertidumbres, pero sobre todo a la confianza de las empresas que siguen apostando por la inversión y el empleo, empresas que nos tendrán siempre de su lado en este objetivo compartido.
Bien es cierto que en la pasada legislatura hemos superado muchas dificultades sobrevenidas, y aún hoy nos encontramos ante un horizonte marcado por la incertidumbre externa, pero es imprescindible seguir contando con políticas activas de empleo que permitan a la ciudadanía, por un lado, seguir contando con mejores oportunidades de inserción laboral y, por otro,permitir a las empresas un entorno donde crecer.
Y ello nos fija retos, unos retos para los que invitamos a los ciudadanos y ciudadanas que necesitan nuevas oportunidades de empleo a conocer las políticas que desarrollamos desde el Gobierno que preside Emiliano García-Page, que incluyen formación para la cualificación, recualificación y el reciclaje profesional, programas de integración e inserción laboral, incentivos económicos a la contratación o al autoempleo y también servicios de orientación profesional a través de la red de Oficinas Emplea.
Y todo ello, cabe insistir, de la mano del diálogo con los agentes sociales, procurando responder a sus demandas con el fin de cumplir con los objetivos comunes de estabilidad y crecimiento.
* Agustín Espinosa es Delegado provincial de Economía, Empresas y Empleo en Ciudad Real