Participación: vacuna contra el despotismo

Artículo escrito por Helena Galán Soria, secretaria de Participación y Producción de Podemos C-LM

Cuando la sociedad civil reclama a los gobiernos e instituciones que escuchen y tengan en cuenta la opinión de la ciudadanía en la toma de decisiones, la elaboración de leyes o la puesta en marcha de iniciativas, se está demandando participación.

En los últimos años, los cauces y mecanismos para hacer posible que la participación de la ciudadanía sea más ágil y efectiva han tomado un renovado impulso. La ley regional de Participación Ciudadana de Castilla la Mancha aprobada en el 2019 es un paso en esa dirección. En el ámbito local tampoco faltan iniciativas, un buen ejemplo es la ciudad de Toledo, que durante la pasada legislatura implementó un amplio y novedoso conjunto de instrumentos para la participación. Tengo que confesar que en ambos procesos estuve plenamente implicada.

En la actualidad, como responsable de la Secretaría de Participación y Producción de Podemos C-LM, me empeño en seguir haciendo efectivo el compromiso con el fomento de la participación, también en lo interno de la organización, porque lo considero un pilar básico para una fuerza política abierta, que quiere escuchar, que presta atención tanto a lo que opina “su gente” como a otras visiones de aquellos que quieren trasladarnos sus reflexiones o demandas. Creo que esa es la manera más enriquecedora de construir propuestas políticas conectadas con la realidad para que seamos capaces de dar respuesta a lo que la sociedad espera. Las formaciones políticas que quieran representar de verdad a la sociedad necesitan escuchar, intercambiar y elaborar de forma abierta sus postulados, esos que después trasladará a la agenda política para influir e impulsar cambios.

Estamos participando en todos los procesos de consulta para la elaboración de leyes en Castilla-La Mancha. Gracias a la Plataforma de Participación y a la Ley de Participación autonómica, hoy es posible trasladar propuestas. Hasta el momento hemos podido hacer aportaciones a la Ley de Despoblación, al proyecto de Ley LGTBI autonómico y al proyecto para una nueva ley de calidad Agroalimentaria en Castilla-La Mancha. Para armar nuestras aportaciones hemos desarrollado procesos internos de escucha, elaboración abierta e implicación en Podemos C-LM.

Queríamos que las propuestas tuvieran la solidez de la participación y la escucha. Para ello hemos implicado, desde la Secretaría de Participación y Producción y las demás secretarías implicadas, a organizaciones de los sectores relacionados con esas futuras leyes. Entre todas hemos puesto en común inquietudes y puntos de vista. Pero además hemos querido sumar reflexiones individuales de personas interesadas, abriendo cauces para canalizar sus visiones en los proyectos, conformando con todo ello las aportaciones que hemos podido trasladar desde nuestra formación a cada uno de los proyectos legislativos mencionados.

Creo que una organización política es más útil a la ciudadanía cuando es capaz de escuchar y debatir con los interesados y permite que sus propuestas se empapen de la realidad que la participación aporta. Además, es una excelente fórmula contra el despotismo ilustrado del que muchas instituciones, partidos y organizaciones hacen gala.