Las cabinas telefónicas, un bien antiguo de servicio público
Les proponemos una cosa: cuando vayan paseando por la calle fíjense en si hay alrededor alguna cabina de teléfono con aspecto de abandono. Comprobarán que nos hemos acostumbrado a convivir con ellas, haciéndolas casi invisibles. El Gobierno de España ya trabaja en una nueva ley que permita a los ayuntamientos retirarlas si lo consideran oportuno.
La cuenta atrás ya ha comenzado. Quizá este sea el último año en el que convivamos con las cabinas telefónicas. Esta tradición va a dejar de estar protegidas por ley como un bien de servicio público y antes de final de año sabremos dónde, cuándo y cómo se retirarán hasta desaparecer.
Según el último censo de Telefónica, España suma un total de 14.824 cabinas. Algunas todavía con espacio para hablar en privado y otras, que llegaron más tarde, ya solo tienen separación entre teléfonos.
En Valdepeñas hay de los dos tipos y todas acumulan pintadas y carteles, pues su uso actualmente es casi nulo. Atrás queda ya la nostalgia del que necesitaba monedas para poder tener una conversación a distancia y del que no sabía quién le llamaba.
En los próximos meses asistiremos a su último adiós.