El Viña Albali Valdepeñas se adelanta en la Copa del Rey con otro golazo de la Marea Azulona

Ayer por la noche cerca de 300 aficionados de la Marea Azulona acudieron al Virgen de la Cabeza después del entrenamiento del Viña Albali para despedir a los suyos que mañana comienzan su andadura en la Final Four de la Copa del Rey ante nada más y nada menos que el anfitrión, Jaén. Aunque el equipo viaja hoy después de comer, la afición prefirió despedirlos ayer por la noche para desearles toda la suerte del mundo y para que, como siempre, noten que Valdepeñas está con ellos. 

Fue alrededor de las 22:30 cuando Rafa Rato abrió una de las puertas del pabellón y detrás de él aparecieron todos. Ahí fue cuando aparecieron el humo azul, las bengalas y los cánticos. "Salalalalalala, Albali alé" comenzaba a oírse en los aledaños del Virgen de la Cabeza con todas las voces gritando a pleno pulmón. A ellos se sumaban las gargantas de la plantilla que de tanto animar la Marea ya se han aprendido la mayoría de las canciones. 

La comunión que existe entre equipo y afición es innegociable. Jugadores y cuerpo técnico se pusieron sobre una larga lona azul y, con distancia, todos cantaron y saltaron más unidos que nunca. Porque saben que este fin de semana se puede hacer historia y porque tanto unos como otros quieren hacerla. Uno de los grandes momentos de esta despedida fue cuando Sergio González cogió un megáfono y comandó los cánticos de todos. Batería y Nano subían al cielo cada uno una bengala de humo azul y la euforia se desataba.

Un momento inolvidable que hace crecer este deporte, que coloca al fútbol sala en el panorama nacional, con lo difícil que están las cosas. Cuando parecía que la Marea no podía superarse después de la Copa de España, va y lo hace. Y todo antes de lo que se ha convertido en un clásico, todo antes de Viña Albali - Jaén para que el que prevé que se desplacen 2.000 aficionados valdepeñeros. El partido ya ha empezado.