Una familia de Puertollano ha acogido en su hogar a tres ucranianas, una de ellas de 19 años más sus dos hermanas de 17 y 11 años de edad. Es una información que pudimos conocer en el día de ayer de la mano de "Lanzadigital".
La reciente invasión militar por parte de Rusia de Ucrania está provocando la salida masiva de la población de este país. Miles de ucranianos ya han abandonado su tierra en busca de un nuevo hogar lejos de la guerra.
Es el caso de estas tres ucranianas, que compraron un billete de avión el pasado sábado y el lunes volaban en dirección a España, recalando definitivamente en Puertollano este martes. Para lograrlo, contaron con el apoyo de sus padres, que pusieron el bienestar de sus hijas por delante del dolor que les producía tener que enviarlas a otro país en medio de una gran incertidumbre.
Dado que la mayoría de los refugiados ucranianos, hasta el momento, se están desplazando hacia los países fronterizos con Ucrania, como Polonia o Rumanía, puede llamar la atención que estas tres chicas ucranianas hayan elegido Puertollano como su nuevo lugar de residencia, pero tiene una explicación.
María del Mar, vecina de Puertollano, "conocía la más pequeña, que ya había acogido en un programa solidario y que ahora ha recibido con los brazos abiertos para evitar que vivan una guerra". Según hemos podido conocer a través de "Lanzadigital", Mª del Mar había acogido hacía dos años a la pequeña de esta familia ucraniana en una de las vacaciones que la asociación CREAN organizaba para llevar niños ucranianos hasta Puertollano.
"El contacto entre ambas familias -la de Puertollano y la de Ucrania- no se había perdido, y en estos últimos días la madre de estas niñas le llevó a pedir si estaría dispuesta a acoger a las tres en su hogar ante el escenario bélico que se cernía sobre Ucrania. Residentes en Kiev, compraron un billete de avión el pasado sábado y el lunes volaban ya camino de España dejando atrás a sus padres, pero con la esperanza de encontrar un futuro mejor en Puertollano, adonde llegaron el pasado martes, por lo menos alejadas de los sinsabores de una guerra", informa el medio provincial.
Sin embargo, su situación todavía no está resuelta del todo, pues han entrado a España en calidad de turistas, de forma que deberán solicitar asilo político para poder ser escolarizadas en Puertollano. Además, por ahora, las dos más pequeñas están bajo tutela de la mayor; las dos mayores, a diferencia de la más pequeña, sí manejan algo de español.
Cabe destacar la solidaridad mostrada por esta familia de Puertollano, que ha abierto las puertas de su casa a estas jóvenes ucranianas, evitando que tengan que vivir en primera persona la tragedia de la guerra.
